El material porcelánico es una superficie fabricada a partir de una mezcla compacta de minerales naturales cocidos a altas presiones y temperaturas, lo que le confiere una gran dureza, resistencia al desgaste y al rayado, así como una superficie no porosa que facilita su limpieza e impide la absorción de manchas. Estas características hacen del porcelánico un material idóneo para encimeras de cocina, ya que soporta perfectamente el uso diario, el calor y los productos químicos habituales, manteniendo su belleza y funcionalidad a lo largo del tiempo con un mantenimiento mínimo.
El granito es una piedra natural muy apreciada por su belleza única y excepcional durabilidad. Su estructura compacta le otorga una gran resistencia a rayaduras, impactos y altas temperaturas, convirtiéndolo en un material perfecto para encimeras de cocina que requieren un uso intensivo. Además, el granito cuenta con patrones naturales exclusivos que aportan un toque elegante y sofisticado a cualquier espacio. Su resistencia a las manchas, su larga vida útil y atractivo estético hacen del granito una opción clásica e inmejorable para encimeras resistentes y con estilo.
Los compactos de cuarzo son superficies fabricadas con una mezcla de aproximadamente un 90% de cuarzo natural junto con resinas y pigmentos, lo que les confiere una gran resistencia, dureza y uniformidad en el color y textura. Gracias a su superficie no porosa, estos materiales son altamente resistentes a las manchas, rayaduras y golpes, además de ser fáciles de limpiar y mantener. Estas propiedades hacen que los compactos de cuarzo sean una opción ideal para encimeras de cocina duraderas, funcionales y estéticamente atractivas.
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